-Lydiette Carrión-
En la mañana de este miércoles se registró el cuarto atentado por grupos de corte anarquista en las últimas dos semanas. En esta ocasión, en vez de ser utilizado gas butano, se hizo mediante un cohete hecho a base de dinamita. Al mediodía, la Secretaría de Seguridad Pública anunció que había detenido a dos personas: César Velásquez, de 36 años; y Yahir López, de 21.
Los cuatro atentados sufridos en las últimas semanas han sido reivindicados por tres distintas organizaciones, y no una sola, como sugirieron las autoridades del Distrito Federal. Pero estas organizaciones comparten una ideología cercana al anarquismo, y no a los grupos armados marxistas convencionales, como se ha elucubrado recientemente en diversas columnas y diarios mexicanos.
Mientras tanto, las Células Autónomas de Revolución Inmediata (CARI), que reivindicaron el atentado contra la Renault, realizado el 8 de septiembre, enviaron un segundo comunicado para “aclarar algunas cuestiones”.
“Si el gobierno intenta sacarse la espina primero diciendo que… son el mismo grupo en tres atentados con características políticas diferentes (aunque similares), o sea su incompetencia no es responsabilidad de nosotr@s ni de otros grupos (SIC)”.
“El gobierno del distrito federal mediante sus instituciones investigadoras han dicho que en base (sic) del modus operandi realizado en las ultimas tres explosiones puede tratarse del mismo grupo, con la excepción quizás del de la automotriz en la cual se dejó un mensaje (mismo el cual fue distorsionado por algunos mass media y por la revista Proceso al afirmar que pertenece a un grupo “terrorista” español inexistente en México)”.
Ante esto “les decimos que la utilización de gases butano como expansor (sic) explosivo no es nueva de estas tres semanas. Se ha utilizado en diferentes ocasiones por diferentes grupos con diferentes tendencias políticas. Por ejemplo, en el 2006: seis bombas de composición similar fueron colocadas por TDR, Tendencia democrática revolucionaria, grupo que es una escisión del Ejército Popular Revolucionario”.
Con esta aseveración, CARI mostró conocimiento de causa sobre los grupos armados de corte marxista en México. Diversos analistas en México aseguraron que CARI podría ser cercano a estos grupos. Sin embargo, el resto de su discurso es cercano al anarquismo. En el comunicado CARI mencionó un atentado a un restaurante KFC que casi no fue retomado por los medios de comunicación, en diciembre de 2007.
El atentado contra una sucursal Bancomer y una pastelería “El Globo”, el pasado primero de septiembre, fue reivindicado por “Revuelta verdinegra” en coordinación con el “Frente Subversivo de Liberación Global”.
El atentado contra la Renault fue reivindicado por CARI. Y la explosión en una tienda de artículos de lujo, en Polanco, por el Frente de Liberación Animal, en el contexto de un movimiento de boicot mundial contra la tienda Max Mara convocado desde Italia.
Hasta el miércoles no se tenía información sobre la autoría del atentado del 16 de septiembre.
Pero la Ciudad de México no es la única sede de estos atentados. En la misma página que publica los comunicados de estos tres grupos, otra célula en Guadalajara reivindicó un atentado contra un Bancomer en Guadalajara el 3 de septiembre pasado. Se han registrado acciones en Guaajuato y otras ciudades más.
La Haine
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